Bárbara Estermont

Bárbara Estermont

Personalidad

La palabra adorable le queda corta. Bárbara es el canon de una dama en Poniente a la que, aún, no le ha tocado tan de cerca el Juego de Tronos. Llena de ilusiones, de amor y altruismo es capaz de llegar a cualquier lugar y encender la chispa de la felicidad. Como si portara en su interior una especie de luz que comparte sin siquiera dudarlo o dubitar un segundo en ello, es capaz de iluminar el más oscuro de los lugares. Aunque delicada para con los sentimientos de los demás, siendo profundamente empática, es capaz de hablar y cuidar de cada persona de una manera absolutamente desinteresada hasta que logre salir de aquellos fosos insondables de la depresión. Cree ciegamente en que existe la humildad, el amor y lo bueno dentro de cada persona aunque el mundo se centre solo en las cosas negativas. Ella misma es capaz de llegar a justificar muchas acciones y sucesos, encontrándole la vuelta positiva a casi todo.

De intensa devoción, no hay nada en el mundo que pueda meterse entre su religión y ella. Difiere de las demás religiones y, aunque las respeta, es capaz de entrar en debates animados sobre el protocolo, prestigio, ceremonias, entre otros. Es curiosa por naturaleza, con lo cual, suele entrar en conversaciones muy fácilmente con foráneos y extranjeros tanto de otros Reinos como de Essos. Más de una vez se le pilló yendo al  puerto sin permiso, escoltada por guardias porque si algo tiene la muchacha es que despierta en cualquier el sentido de protección y la necesidad de complacerla y cuidarla para que no pierda la inocente sonrisa que permanece  intacta en sus labios desde que se levanta hasta sus oraciones nocturnas antes de dormir.

Como mujer también tiene sueños y deseos, pero su más profundo secreto es llegar  a tener el romance de su vida. Cuando aún no se había descubierto la verdad sobre Lady Lyanna y el príncipe Rhaegar, la envidió lo suficiente porque tuviera el coraje de demostrar y luchar por su amor al rebelarse ante toda la sociedad. Sin embargo, tras escuchar y enterarse de lo que verdaderamente había ocurrido... Se decepcionó profundamente, porque vio en los ojos de Robert el desastre que ella el había provocado. Entendió, entonces, que el amor no siempre es correspondido a la par de que es peligroso. Por ello no comparte que su gran sueño es ello, cada una de sus respuesta está meticulosamente estudiada para siempre responder a los deseos de sus padres, a lo que se espera de ella como señorita.

Ha tenido algún flirteo y cortejo por parte de caballeros pero nunca ha llegado a nada pues ella sabe que debe llegar pura e impoluta a su matrimonio. Por ende, pese a sus infinitas sonrisas, su cordialidad y su coquetería; nunca nadie ha logrado nada con ella.

Historia

Última hija del matrimonio entre Eldon Estermont & Sylva Santagar, ha sido la luz de los ojos de su familia desde que nació. Tanto de los Estermont como de los Baratheon. Su niñez se desarrolló con tranquilidad, siempre enfocándose en los cánones para con su educación. Bordado, literatura, arte, baile, eventos;entre otros. Con cierto libertinaje, influida por las ascendencias de su madre dorniense desarolló una personalidad simpática, amable y coqueta. No obstante, la incorporación de la religión de su padre marcó los límites de esa personalidad para siempre y ella se rige por ellos  con devoción.

Avanzada su vida fue enviada a Bastión de Tormentas, en principio, para que conociera a sus primos. Sin embargo, Eldon tenía otra cosa en mente. Alejarla un poco de su madre para que su influencia sureña no fuese tan fuerte. Allí se quedó, entonces, como pupila de los Baratheon siendo criada por una estricta Septa. Creó pronto un lazo con cada uno de sus primos, aunque poco pudo compartir con Robert porque fue enviado al Nido. Entonces se dedicó a conocer a Stannis con quien pronto encontró la aficción de la heráldica de Poniente y, en parte, las historias que fundaban cada casa y que armaban el conjunto de relatos que formaban a Poniente como hoy en día se elevaba.

Con el tiempo se convirtió en un ícono dentro de Bastión de Tormentas, era la chica adorable a la que se le concedía cada capricho que pedía. Desde un nuevo postre hasta la importación de telas especiales para sus bordados. Ya que es una de sus más grandes talentos naturales. Varios de sus bordados adornan el salón principal de Bastión de Tormentas.  Todo iba viento en popa, según su padre negociaría su matrimonio con Paxter Redwyne después de que Robert se casara con Lyanna Stark.

Evidentemente, aquello no sucedió. Las trágicas situaciones que detonaron las acciones de Lyanna y Rhaegar destrozaron a Robert de una manera que tocó mucho a Bárbara. Aunque ella fue enviada de vuelta a Piedraverde, con la guerra y los vientos belicosos que asediaban Bastión de Tormentas, ella pidió volver junto a su primo. Tras mucho pedirlo, tras muchos cuervos, finalmente Eldon permitió que ella fuera. Sabía perfectamente el lazo que compartían pero, más aún, conocía el poder de su hija para darle vuelta a cada situación. La excusa perfecta fue la llegada de Lysa a Bastión de Tormentas, como esposa de Stannis. Se convirtió en su dama y apoyo, aunque eran absolutamente diferentes. Mientras ella era nostálgica y tímida, Bárbara bullía (y bulle) de energía. Pero la Estermont, consciente de que Lysa necesitaba su ayuda no se separó de ella ni siquiera cuando su familia se rebeló ante Aerys. Intentó apoyarla y brindarle consuelo tras la llegada de Stannis con la noticia de que, por la muerte de todos, ella sería Señora de Aguasdulces. De aquella fortaleza fantasma. Pero los logros de Stannis lo llevaron lejos, a Desembarco del Rey.

Pero Robert se quedó, y lo que quedó de él no era nada de lo que Bárbara recordaba. Dolida por los estragos dedicó día y noche a una sola misión: Verlo sonreír de nuevo. Sabía que su corazón estaba roto, pero también que había actuado con honor ante Lyanna Stark, pues siendo dama de Bastión sabía que la loba estaba sufriendo la consecuencia de sus actos y moría un poco más con cada amanecer. Se esforzó por brindarle consuelo, por hablarle y demostrarle que la belleza del mundo seguía existiendo en cada detalle. Y cuando lo veía más abierto, le hablaba de la posibilidad de avanzar, de hacer paz con su memoria y con sus recuerdos y seguir adelante porque tenía una vida que vivir.

De alguna manera quiere creer que algo de sus palabras logró penetrar en la carcasa de su primo porque hace un par de meses le confesó detalles sobre Lynesse Hightower, poco antes de que avisara su compromiso. Aquello la volvió una mujer aún más feliz y casi completa. Corrió a los brazos de Robert llena de felicidad por la posibilidad de que tuviese un futuro en el que la alegría formara parte, porque así era como debía vivirse la vida.

Con la víspera del matrimonio de Robert y Lynesse, espera que su padre pueda volver a charlar sobre su matrimonio aunque los Redwyne han caído bajo tras el asedio de los piratas a sus tierras. Por ende, espera que otro prospecto se ponga en su camino para cumplir su deber para con su casa y encontrar el amor de su vida.

¿Cuál es tu papel en el Juego de Tronos?

Su papel, actualmente, es ser sólo una pieza. Siendo la hija menor de la casa Estermont y prima de los Baratheon, se estima que su matrimonio pueda realizarse con algún Lord importante y aquello la mantiene muy ilusionada.  

¡Ficha aceptada!

Las bonitas flores de primavera suelen quemarse durante el verano o congelarse en invierno. Esperemos que, por tu seguridad, mantengas esta estación en tu vida por siempre. Ni la sonrisa más brillante logra derretir el frío hielo del Norte.